Búsqueda personalizada

lunes, 14 de mayo de 2012

El ordenador que evita que "se cuelgue"

La interacción entre cerebro y ordenador no es algo nuevo. Este sueño ya lo “vimos” en Xataka cuando os adelantamos la exclusiva de la idea de Google de conectarnos a un ordenador para buscar y almacenar nuestros recuerdos (para los despistados, era una inocentada).
El sistema Brainput que están desarrollando en el MIT no se aleja mucho de esa idea del ordenador indagando en el cerebro humano.
El sistema, desarrollado en colaboración con la universidad Tufts, pretende detectar el momento en el que el cerebro humano está cerca del colapso por cansancio, estar realizando varias tareas a la vez o cualquier otra situación en la que su capacidad de organización se vea mermada. Entonces es cuando el ordenador le echa un cable.
Esa ayuda del ordenador a un cerebro a punto de colgarse se podría aplicar de forma directa a la interfaz de un programa haciéndolo más sencillo, o poner en marcha un sistema de asistencia a la conducción o al manejo de robots. Precisamente con robots ya han realizado una prueba que consistía en que los dos robots que estaban siendo “dirigidos” por un trabajador, adquirían algo de autonomía al detectar que su controlador empezaba a fallar en el mano de los dos equipos a la vez.
Para determinar el funcionamiento del cerebro se recurre a un dispositivo llamado functional near-infrared spectroscopy (fNIRS) que colocado en la cabeza del usuario, es capaz de detectar cuándo estamos realizando multitarea y poder ajustar el trabajo a esa saturación del cerebro.
Imagen | Neurobronquers.
Vía | Technology Review.


Primer paso para curar algunos tipos de ceguera 

Algo tan sencillo como una célula fotovoltáica es el punto de partida de un grupo de investigadores que acaba de publicar su idea para solucionar algunos casos de ceguera en la revista Nature.
Resulta que muchos casos de pérdida de visión se deben a la degradación de las células de la retina encargadas de captar la luz. Esas células van desapareciendo pero todas las demas estructuras del ojo (músculos, conexiones nerviosas…) siguen siendo funcionales.

Lo que ha hecho el grupo que ha publicado en Nature Photonics ha sido buscar soluciones para sustituir sólo esa parte del ojo con una pieza artificial que convirtiese la luz en impulsos eléctricos capaces de ser leídos por el cerebro. El resultado de esa idea es una célula fotovoltáica especial.
Esta célula está compuesta de electrodos de óxido de iridio sobre una base de silicio y tiene la ventaja de que no necesita cableado ni energía para funcionar ya que es la propia luz la que la hace generar una pequeña corriente que es captada por los nervios del ojo e interpretada como distintos niveles de luz que forman una imagen. Otra de las ventajas del sistema es que el ojo sigue manteniendo intacta su capacidad de enfocar o moverse.
Hasta aquí la parte buena. Casi puede pensarse que los responsables del proyecto se liaron un poco en este punto. Resulta que la célula fotovoltaica es demasiado débil y necesita más luz, mucha más luz, que el ojo para funcionar.
Para solucionar este problema, los investigadores han creado un complejo y raruno sistema de gafas que enfocan un láser en el ojo para sobreexcitar la célula fotovoltaica con arreglo a la imagen que capta una cámara. No está mal, pero aún habrá que esperar un poco para que esta tecnología esté totalmente afinada. De momento la idea original es realmente prometedora.
Más información | Nature


El futuro MacBook Pro 

 

Con los nuevos procesadores de Intel, la salida de los nuevos equipos de Apple de sobremesa y portátiles de la gama Pro es solo cuestión de esperar.
Finales del mes de junio parece la fecha probable de la salida de los nuevos equipos. Un iMac más fino está en todas las quinielas, así como la renovación de la gama de portátiles Pro. Los rumores que llegan del sitio 9to5mac apuntan a que la estrella de la presentación de Apple podría ser un nuevo Macbook Pro con pantalla de 15 pulgadas en la que la resolución sería el gran adelanto con el que Apple pretendería volver a sacar ventaja competitiva con los ultrabooks bajo Windows.
El nuevo Macbook Pro alcanzaría una resolución que podría ser de 2880 × 1800 píxeles, lo que casaría con rumores anteriores sobre el nuevo panel de estos equipos de Apple. Signos de este aumento de píxeles en la pantalla de los portátiles de Apple también se han encontrado en la próxima versión del sistema operativo nativo de los equipos de la manzana, y como os decía, sería un elemento diferenciador más allá del diseño o el propio Mac OSX.
El diseño de los nuevos MacBook Pro también se renovaría con una silueta más delgada, sin unidad óptica y parece que con la llegada de un puerto USB 3.0 que haría compañía a la apuesta de Apple: Thunderbolt. Nadie dijo nunca que fueran incompatibles.
Vía | 9to5mac.

No hay comentarios:

Publicar un comentario